BBC.
Piensa en el hombre del Monopolio.
¿Tiene un monóculo?
Si te imaginaste al personaje del popular juego de mesa con uno, lo sentimos pero estás equivocado. De hecho, nunca ha usado uno.
Si te sorprende esto, no estás solo. Mucha gente tiene el mismo recuerdo falso sobre esta figura.
Este fenómeno también ocurre con otros personajes, logotipos y citas.
Por ejemplo, a menudo se piensa que Pikachu de Pokémon tiene una punta negra en la cola, que no posee.
Y mucha gente está convencida de que el logo de Fruit of the Loom incluye una cornucopia, pero tampoco la tiene.
Este fenómeno de recuerdos falsos compartidos para ciertos íconos culturales se denomina el «efecto visual Mandela».
Las personas tienden a quedar desconcertadas cuando se dan cuenta de que comparten los mismos recuerdos falsos con otras personas.
Eso se debe en parte a que asumen que lo que recuerdan y olvidan es subjetivo y está basado en sus propias experiencias personales.
Sin embargo, la investigación que hemos realizado muestra que las personas tienden a recordar y olvidar las mismas imágenes, independientemente de la diversidad de sus experiencias individuales.
Recientemente, hemos demostrado que estas similitudes en nuestros recuerdos se extienden incluso a nuestros recuerdos falsos.
¿Qué es el efecto Mandela?
El término «efecto Mandela» fue acuñado por Fiona Broome, una autodenominada investigadora paranormal, para describir su recuerdo falso de que el expresidente sudafricano Nelson Mandela (1918-2013) murió en prisión en la década de 1980.
Se dio cuenta de que muchas otras personas también compartían este mismo recuerdo falso y escribió un artículo sobre su experiencia en su sitio web.
El concepto de recuerdos falsos compartidos se extendió a otros foros y sitios web, incluido Reddit.
Desde entonces, los ejemplos del «efecto Mandela» se han compartido ampliamente en internet.
Estos incluyen nombres como «los Osos Berenstain», una serie de libros para niños, que se recuerda erróneamente con la terminación «-ein» en lugar de «-ain», y personajes como C-3PO de Star Wars, que se evoca falsamente con dos patas doradas en vez de una pierna de color oro y otra plateada.
El «efecto Mandela» se convirtió en alimento para las personas que creen o promueven teorías conspirativas: los recuerdos falsos son tan fuertes y específicos que algunas personas los ven como evidencia de una dimensión alternativa.
Debido a eso, la investigación científica solo ha estudiado el «efecto Mandela» como un ejemplo de cómo las teorías conspirativas se difunden en internet.
Ha habido muy poca investigación sobre el «efecto Mandela» como un fenómeno de la memoria.
Pero comprender por qué estos íconos desencadenan recuerdos falsos tan específicos podría darnos más información sobre cómo se forman los recuerdos falsos.
El «efecto visual Mandela», que afecta específicamente a los íconos, fue una manera perfecta de estudiar esto.
Un fenómeno robusto de memoria falsa
Para ver si el «efecto visual Mandela» realmente existe, realizamos un experimento en el que presentamos a las personas tres versiones del mismo ícono.
Una era correcta y las otras dos estaban manipuladas, y les pedimos que seleccionaran la correcta.
Había 40 conjuntos de íconos e incluían a C-3PO de la franquicia de «La guerra de las galaxias», el logotipo de Fruit of the Loom y el hombre del juego de mesa Monopolio.
En los resultados, que han sido aceptados para su publicación en la revista Psychological Sciences, encontramos que a las personas les fue muy mal en siete de ellos, y solo eligieron el correcto alrededor o menos del 33% de las veces.
Para estas siete imágenes, las personas identificaron constantemente la misma versión incorrecta, no solo eligieron al azar una de las dos versiones incorrectas.
Además, los participantes dijeron sentir mucha confianza en sus elecciones y estar muy familiarizados con estos íconos a pesar de estar equivocados.
En conjunto, es una clara evidencia del fenómeno del que la gente en internet ha hablado durante años: el «efecto visual Mandela» es un error de memoria real y constante.
Descubrimos que este efecto de memoria falsa era increíblemente fuerte, en múltiples y diferentes formas de poner a prueba la memoria.
Incluso cuando las personas vieron la versión correcta del ícono, eligieron la versión incorrecta solo unos minutos después.
Y cuando se les pidió que dibujaran libremente los íconos de memoria, también incluyeron las mismas características incorrectas.
Sin una causa universal
¿Qué causa esta memoria falsa compartida para íconos específicos?
Descubrimos que las características visuales como el color y el brillo no podían explicar el efecto.
También rastreamos los movimientos del ratón de los participantes mientras veían las imágenes en la pantalla de una computadora para ver si simplemente no escanearon una parte en particular, como la cola de Pikachu.
Pero incluso cuando las personas vieron directamente la parte correcta de la imagen, eligieron la versión falsa inmediatamente después.
También descubrimos que para la mayoría de los íconos, era poco probable que las personas hubieran visto la versión falsa de antemano y solo recordaran esa versión, en lugar de la versión correcta.
Puede ser que no haya una causa universal. Diferentes imágenes pueden provocar el «efecto visual Mandela» por diferentes razones.
Algunas podrían estar relacionadas con las expectativas previas ante una imagen, otras con la experiencia visual previa con una imagen o podrían tener que ver con algo completamente diferente a las imágenes en sí.
Por ejemplo, descubrimos que, en su mayor parte, las personas solo ven la parte superior del cuerpo de C-3PO cuando es representado en los medios de comunicación.
La pierna dorada recordada erróneamente podría ser el resultado de que usaron conocimientos previos (los cuerpos generalmente son de un solo color) para llenar este vacío.
Pero el hecho de que podamos demostrar consistencias en los recuerdos falsos para ciertos íconos sugiere que parte de lo que impulsa los recuerdos falsos depende de nuestro entorno y es independiente de nuestras experiencias subjetivas con el mundo.
*Este artículo se publicó originalmente en The Conversation. Puedes leer la versión original aquí.
Deepasri Prasad es estudiante de doctorado en neurociencia cognitiva en Dartmouth College, EE.UU.
Wilma Bainbridge es profesora asistente de psicología en la Universidad de Chicago, EE.UU.