Fuerza Quds: cómo opera el grupo de élite de Irán y cuál era el rol en él del general Zahedi, asesinado en Damasco en un ataque atribuido a Israel

Fuente: BBC.

Zahedi era una figura clave en la Fuerza Quds, el brazo paramilitar de élite de la Guardia Revolucionaria iraní que suministra armas e inteligencia a sus aliados.

El ataque al consulado iraní en Damasco este lunes -que varios gobiernos atribuyen a Israel- dejó al menos siete muertos, entre ellos una importante figura militar del régimen de los ayatolás.

Se trata de Mohamed Reza Zahedi, general de brigada de 63 años con un largo historial de servicio en el CGRI (Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica), el poderoso ejército paralelo de Irán y el más numeroso dentro de sus fuerzas armadas.

Zahedi era un alto comandante de la Fuerza Quds, el brazo paramilitar de élite de la Guardia Revolucionaria a cargo de las relaciones con gobiernos y grupos aliados de Teherán.

Murió junto a su número dos, el también general Mohamed Hadi Haji-Rahimi, en el ataque sorpresa que aviones israelíes procedentes de los Altos del Golán -según el Ministerio de Exteriores de Siria- llevaron a cabo sobre el consulado iraní en el distrito de Mezzeh en Damasco.

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El ataque destruyó el edificio de varias plantas situado junto a la embajada de Irán, que no sufrió daños.

El general asesinado era el comandante de la Fuerza Quds en Siria y Líbano, donde jugaba un papel crucial en la asistencia militar tanto al régimen de Bashar al Asad como a la organización político-militar Hezbolá.

Analizamos cómo opera esta temida organización y cuál era el rol de Zahedi.

Clave en la política exterior iraní

La Fuerza Quds es un importante instrumento de la política exterior iraní que muchos expertos describen como una combinación de las fuerzas de operaciones especiales y la Agencia Central de Inteligencia (CIA).

El general Hossein Salami
El general Hossein Salami comanda las Fuerzas Quds desde 2020.

Surgió como la rama de asuntos exteriores de facto durante la expansión del CGRI.

Su nombre significa en farsi y árabe Jerusalén, ciudad que sus combatientes prometieron «liberar».

La organización opera de manera encubierta y a veces abiertamente en varias partes del mundo.

Se la vincula con el grupo Hezbolá del Líbano y las milicias chiitas en Irak y en Afganistán.

A la Fuerza Quds se le ha atribuido la autoría intelectual de diferentes ataques mortales, como el atentado contra los cuarteles en Beirut en 1983 en el que murieron 241 infantes de marina estadounidenses, 58 soldados franceses y 6 civiles libaneses.

Tanto EE.UU. como la Unión Europea (UE) la han acusado de distribuir armas en Siria para ayudar al régimen de Bashar al Assad a reprimir a los rebeldes en el país árabe.

Washington también los ha señalado como responsables de armar y entrenar a talibanes en Oriente Medio.

Esta organización se enfoca en apoyar y asesorar en lugar de participar directamente en incursiones militares.

Esto permite a Irán negar toda participación en operaciones militares e insurgentes, evitando un conflicto directo con EE.UU.

Entre 5.000 y 10.000 miembros

Debido a la forma en la que opera, es imposible obtener números exactos del tamaño de sus tropas. Sin embargo, existen estimaciones que van desde los 5.000 miembros hasta más de 10.000.

Se les recluta de acuerdo con sus habilidades y por su grado de lealtad a la República Islámica.

Pero como la función principal de la Fuerza Quds es ayudar a establecer milicias aliadas y fuerzas de combate en otros países, el número de reclutados no refleja sus enormes capacidades de influencia y de acción.

Desde 1979, su objetivo ha sido combatir a los enemigos de Irán y extender la influencia del país en la región.

Para intentar contrarrestar su creciente poder de acción, la administración del expresidente estadounidense Donald Trump designó a este brazo paramilitar como una Organización Terrorista Extranjera (FTO, por sus siglas en inglés).

Trump calificó a la Fuerza Quds como un «mecanismo principal de Irán para cultivar y apoyar» grupos terroristas en Medio Oriente.

El gobierno iraní, por su parte, ha negado en diversas ocasiones apoyar organizaciones criminales y acusa a EE.UU. como el culpable de las turbulencias que sacuden Medio Oriente en la actualidad.

En enero de 2020 Estados Unidos asesinó en un preciso ataque selectivo con drones al entonces comandante en jefe de la Fuerza Quds, el influyente general de división iraní Qasem Soleimani.

Ayatolá Jamenei
El ayatolá Jamenei prometió venganza tras el asesinato de Soleimani.

El asesinato de Soleimani fue un duro golpe para el régimen del ayatolá Alí Jamenei, que respondió con ataques a bases estadounidenses en el vecino Irak, elevando la tensión militar entre ambos países.

Soleimani fue reemplazado por el general de brigada Esmail Qaani, de 66 años, quien es el actual líder de la Fuerza Quds.

Mohamed Reza Zahedi

El asesinato de Zahedi es el de más alto perfil en la Fuerza Quds y la Guardia Revolucionaria desde el de Soleimani en 2020.

El general de 63 años desempeñaba un papel clave al ser el principal interlocutor entre Irán y Hezbolá, la organización político-militar libanesa considerada terrorista por la Unión Europea, EE.UU. y parte de la comunidad internacional.

Nacido el 2 de noviembre de 1960, se unió a la Guardia Revolucionaria en 1980 durante la guerra Irán-Irak (1980-88), en la que participó activamente.

Comandó la 44ª División Qamar Bani Hashem entre 1983 y 1986, y la 14ª División del Imam Hussein hasta 1991.

Entre 1998 y 2002 comandó por primera vez la fuerza Quds para Líbano, donde brindó todo tipo de asistencia a Hezbolá.

Más tarde, entre 2005 y 2008 lideró las fuerzas terrestres del CGRI y fue responsable de la base Thar-Allah en Teherán, encargada de la seguridad en la capital iraní.

En 2008 Zahedi se reincorporó a la Fuerza Quds y, hasta su asesinato este lunes, estuvo al frente de esta organización para Siria y Líbano.

Misiles iraníes
La Fuerza Quds se encarga de suministrar armas a países y grupos aliados de Irán.

Según expertos, jugó un papel crucial en el suministro de armas y experiencia técnica a Hezbolá, así como en la coordinación de operaciones contra las fuerzas israelíes en el sur de Líbano.

Además, coordinaba la asistencia militar que el brazo exterior del ejército de Irán presta al régimen de Bashar al Asad y lideraba la Unidad 18000 del CGRI, que opera en Siria en colaboración con el ejército local para el contrabando de armas, munición y equipos militares.

Desde 2010 Zahedi figuraba en la lista de terroristas y sus patrocinadores sujetos a sanciones del Departamento del Tesoro de Estados Unidos por actuar como “enlace con Hezbolá y los servicios de inteligencia sirios” y “garantizar envíos de armas” a la organización islamista radical de Líbano.