Cuál es el origen de la «relación especial» entre Colombia e Israel (y cómo Petro la transformó)

Fuente: BBC.

En las últimas décadas, los gobiernos colombianos habían afianzado una «relación especial» con Israel. BBC Mundo analiza el origen de esta relación y los posibles efectos de la ruptura de Petro.

Era una «relación especial», dos de los vértices de un triángulo estratégico con Estados Unidos que parece haber perdido su forma este miércoles 1 de mayo.

El presidente de Colombia, Gustavo Petro, anunció que romperá relaciones diplomáticas con Israel después de meses de un deterioro acelerado de los vínculos entre ambos países.

Desde que Israel respondió militarmente en Gaza a la incursión del grupo militante Hamás en su territorio del pasado 7 de octubre, Petro ha denunciado con frecuencia lo que considera «un genocidio» israelí contra los palestinos de la Franja.

Mientras, en Israel causaron indignación algunas de las palabras de Petro. Lior Haiat, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel, acusó al mandatario de emitir declaraciones «hostiles y antisemitas» pocos días después de agudizarse el conflicto.

Mauricio Jaramillo, experto en relaciones internacionales de la Universidad del Rosario en Bogotá, considera que el anuncio de Petro de este miércoles es «sorpreviso por el momento en que se produce, en pleno desfile de 1 de mayo», pero que es «consistente y esperado» por la postura del mandatario en los últimos meses.

El gobierno de Petro es el primero de izquierdas en la historia de Colombia.

Su decisión rompe ahora con décadas de afianzamiento de las relaciones entre su país e Israel, en las que Colombia era considerado el principal aliado de los israelíes en América Latina.

El país sudamericano se convierte así, tras Bolivia, en el segundo de América Latina que corta lazos diplomáticos con Israel desde el 7 de octubre.

Pero, ¿cómo había surgido esta relación especial? Y ¿qué puede cambiar ahora para Colombia?

De relación normal a especial

Iván Duque durante una visita a Israel en 2001.
El expresidente Duque firmó un Tratado de Libre Comercio con Israel en 2020.

Colombia fue uno de los países que se abstuvo en la votación de 1947 en la ONU que buscaba resolver el conflicto entre palestinos e israelíes y finalmente dio origen a la creación del Estado de Israel.

En 1960, ambos países establecieron embajadas en sus respectivos territorios y entablaron relaciones comerciales, pero eso no impidió que Colombia protestara en foros y votaciones de la ONU por los ataques y ocupaciones israelíes en territorios palestinos y abogara por la neutralidad de Latinoamérica en ese conflicto.

Durante la Guerra Fría, Colombia se convirtió en un aliado crucial para Estados Unidos en América Latina.

«La conjunción de intereses entre estos dos países e Israel hizo que se creara un triángulo estratégico entre los tres», le dijo en una entrevista a BBC Mundo Marcos Peckel, profesor de diplomacia y relaciones internacionales y representante de la comunidad judía en Colombia.

Tras el ataque a las Torres Gemelas en 2001 y la llegada al poder de Álvaro Uribe en 2002, Colombia se sumó a lo que Estados Unidos llamó «la guerra global contra el terrorismo».

Los expresidentes de Colombia y EE.UU., Álvaro Uribe y George W. Bush, en un encuentro en 2006.
La relación entre Colombia e Israel avanzó cuando el país sudamericano apoyó la guerra global contra el terrorismo de Estados Unidos.

Desde ese momento, Colombia declaró a las guerrillas de su territorio «organizaciones terroristas» y pasó de ver su propia guerra como un conflicto armado a una «amenaza terrorista».

Y fue entonces cuando los militares israelíes, que durante décadas enfrentaron movimientos que consideran terroristas como Hamás y Hezbolá, entraron de lleno a apoyar a las Fuerzas Armadas colombianas.

Entre 2002 y 2006, según cifras oficiales, las importaciones de material militar de Israel a Colombia se duplicaron.

«Israel es uno de los principales abastecedores de armas de Colombia. El fusil Galil y los aviones KFIR son armamentos fundamentales del ejército colombiano», dice Jaramillo.

Avión de compate KFIR en cielo colombiano.
Los aviones KFIR israelíes se ven con frecuencia en cielos colombianos durante los desfiles por el día de la independencia.

«Colombia había mantenido un equilibrio histórico con israelíes y árabes, aunque mi impresión es que con los gobiernos de Álvaro Uribe, Juan Manuel Santos e Iván Duque, el país se acercó algo más a Israel», señala el experto.

No obstante, el gobierno de Santos reconoció a Palestina como Estado en 2018.

Dos años después, en 2020, Colombia e Israel firmaron un Tratado de Libre Comercio (TLC), ya bajo gobierno de Duque.

Si bien el acuerdo fue vendido como de «última generación», Jaramillo explica que el intercambio comercial entre los dos países no es tan robusto, que ese tratado fue más simbólico que real y que la cooperación más importante siguió siendo militar.

Expertos consultados por BBC Mundo también destacaron el intercambio cultural y profesional entre ambos países.

Durante los últimos 24 años, por ejemplo, miles de colombianos han hecho parte del Mashav, un programa de educación de la Cancillería israelí para dar entrenamiento a extranjeros en campos como la medicina, la agricultura y la tecnología.

Por eso es tan común ver a colombianos e israelíes pasando meses o años de intercambio en el otro país en busca de enriquecer su formación.

¿Cómo se deterioró la relación y qué efectos tendrá?

Durante meses, la fuerte retórica de Petro sobre las acciones militares de Israel en Gaza y sus amenazas de romper relaciones presagiaron este desenlace.

La incursión de Hamás en Israel el 7 de octubre acabó con más de 1.200 muertes y la toma de 240 rehenes. Las ofensivas de Israel se han cobrado ya más de 34.000 vidas en Gaza.

Después de que Petro comparara el lenguaje del ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, con el que usaban «los nazis con los judíos», Israel anunció a mediados de octubre que «suspendería las exportaciones de seguridad» a Colombia

Mientras, en febrero de este año, Petro suspendió la compra de armas a Israel después de que decenas de personas murieran mientras buscaban comida en Gaza durante una ofensiva israelí.

El mandatario calificó esos actos como «genocidio», dijo que recordaban al «holocausto» y añadió que el mundo debía «bloquear» a Benjamin Netanyahu, el primer ministro israelí.

Pese a las pasadas amenazas de Petro de romper relaciones con Israel, Jaramillo reconoce la posibilidad de que el anuncio de este miércoles sorprenda a la comunidad internacional.

Gustavo Petro durante la alocución este 1 de mayo.
Puede que el momento del anuncio de Petro cause sorpresa, pero su retórica contra Israel y sus amenazas hacía presagiar este desenlance.

«En otras ocasiones, Petro ha emitido promesas o advertencias que tardan en cumplirse. Ahora, el costo de no llevar a cabo la ruptura sería un gran golpe a su credibilidad«, opina el experto.

Habrá preguntas sobre los efectos de esta ruptura, pero de momento pocas respuestas.

Hay dos precedentes, sin embargo, que pueden dar pistas.

«Cuando se rompieron relaciones diplomáticas con Ecuador en la época de Rafael Correa no se tocó la parte comercial. Con Venezuela sí hubo ruptura total», dice Jaramillo.

Lo que sucederá ahora dependerá de Petro.

«¿Expulsará al embajador?¿Suspenderá todos los acuerdos de cooperación militar? ¿Intentará que todo esto quede en lo simbólico para no agravar más la situación?», se pregunta el experto.

Son cuestiones que se irán respondiendo con el paso de los días, aunque atendiendo a la retórica entre ambos países resulta difícil aventurar un desenlace amigable.

Horas después del anuncio del presidente colombiano, el ministro de Relaciones Exteriores israelí, Israel Katz, escribió en X que “la historia recordará que Gustavo Petro decidió ponerse del lado de los monstruos más despreciables conocidos por la humanidad que quemaron bebés, asesinaron niños, violaron mujeres y secuestraron a civiles inocentes”.

«Las relaciones entre Israel y Colombia siempre han sido cálidas, y ningún presidente antisemita y lleno de odio podrá cambiar eso», añadió.