EL DEBER.
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El arquero mundialista con su seleccionado vuelve a Argentina tras 15 años en el fútbol europeo. Jugó en Racing, el AZ neerlandés, la Sampdoria, Monaco, Manchester United, y Venezia.
Sergio Romero se sumó a Boca como nuevo refuerzo de cara a lo que resta del semestre, y hasta diciembre del 2024. El arquero que supo convertir a la selección argentina en finalista de un Mundial en 2014, vestirá de azul y oro después de un largo paso por Europa.
El arquero de 35 años superó la revisión médica y luego firmó contrato con el Xeneize. Este lunes brindó una conferencia de prensa en la Bombonera donde mencionó estar listo para jugar y deslizó un posible debut el 14 de agosto ante Racing, equipo del que Romero es hincha.
Su último club fue el Venezia de Italia, y el arquero también señaló las diferencias de jugar en un club que pelea títulos, de uno que no lo hace. «Ir a Venezia fue un gran reto como futbolista, es ir a un club donde sabés que vas a pelear en los puestos de abajo. Boca es el club más grande de la Argentina y vengo a demostrar que estoy preparado, como demostré en el arco de la Selección Argentina.»
Con respecto al posible debut ante Racing, sentenció que «Todo el mundo sabe que soy hincha de Racing, es público. Pero el fútbol para mí es un trabajo y tengo que hacer todo para que a Boca le vaya bien. Las cosas del destino hicieron que tal vez me toque el primer partido en Avellaneda. Así que si me toca estar, voy a ir a buscar los tres puntos».
Romero llega a Boca a pelear la titularidad con Agustín Rossi, arquero que fue figura en el último tiempo en el club bonaerense. Sin embargo, teniendo a Rossi ‘peleado’ con la dirigencia al no encontrar una buena renovación contractual, todo parece indicar que Romero llega a ser el primer arquero del equipo dirigido por Hugo Ibarra.