Fuente: DW.
El «triángulo del litio» es tan patrimonio de Bolivia, como de Chile y Argentina. Mientras con unos la UE tiene avanzados acuerdos, con Bolivia, Europa apenas «explora».
El acuerdo modernizado de asociación entre la Unión Europea (UE) y Chile se aprobaba en el Parlamento Europeo -con su capítulo de energías y su memorándum de entendimiento sobre materias primas críticas-, mientras Bolivia apenas traía a Europa su segunda convocatoria para «expresiones de interés sobre el desarrollo de proyectos y tecnología para el aprovechamiento de recursos evaporíticos». La carrera por la extracción del litio -abundante en ambos países y en Argentina, y vital para la transición energética que quiere Europa- se escribe con mayúscula.
«A la primera convocatoria de 2021 no se presentaron empresas europeas. China y Rusia sí, y ya están trabajando con Yacimientos de Litio Bolivianos. Hay condiciones importantes para empresas europeas. No obstante, hemos hablado también de una cooperación más integral, que incorpore nuestra lógica de energías renovables, para asumir los compromisos del acuerdo de París. Queremos disponer de un 70 por ciento de energía renovable hasta el 2050, una visión que es compatible con la de la UE y sus Estados miembros», afirmó en Bruselas el ministro boliviano de Hidrocarburos, Franklin Molina.
Investigar el «oro blanco»
Según dijo a DW el ministro boliviano, La Paz busca un acuerdo marco de cooperación con la UE, uno que incluya la asistencia técnica y la financiación, así como los estudios socio-ambientales y geológicos que permitan el aprovechamiento del «oro blanco» para la electro-movilidad y para el almacenamiento energético.
«Queremos también aprovechar los recursos de esos salares instalando plantas de fertilizantes, de cloruro de potasio. Tenemos instalaciones, pero queremos ampliarlas a otros materiales que se han identificado. Requieren participación financiera y empresarial», puntualizó el ministro boliviano.
De su visita a Europa, el titular boliviano de Hidrocarburos se llevó acuerdos bilaterales con Francia. A nivel de la UE, según fuentes europeas, aún no habría nada que anunciar sobre un acuerdo de cooperación. No obstante, los equipos de la Comisión Europea se encontrarían en fase de exploración de proyectos específicos para la explotación del litio, en el marco del Global Gateway.
«Hay que tener en cuenta que Bolivia, por propia cuenta y riesgo, lleva invertidos 1.000 millones de dólares en la exploración minera», responde a DW el ministro Molina. «Pudo haber sido más veloz si hubiese habido inversión extranjera directa, pues las empresas tienen algo que no tienen los Estados: tecnología y capital», concluye. (rml)