Fuente: El Andaluz.
Las autoridades de salud del departamento de Tarija se mantienen en alerta por nuevo caso de hantavirus en lo que va del año. Esta peligrosa patología, transmitida por un tipo de roedor, representa un alto riesgo para la población de las zonas rurales endémicas de Tarija.
Así lo dio a conocer Marcelo Magne, Jefe de Epidemiología del Servicio Departamental de Salud (SEDES) Tarija, quien reveló que el más reciente caso positivo de hantavirus se registró en una localidad cercana a El Salado, en el municipio de Padcaya.
“Ha sido confirmado el último caso de hantavirus en Padcaya, justo en las zonas endémicas para esta enfermedad donde existe el transmisor, que es el roedor Calomys callosus”, señaló la autoridad epidemiológica.
Magne explicó que personal del programa contra esta enfermedad del SEDES se encuentra desplegado en esa zona rural de Padcaya para ejecutar las acciones de control correspondientes en torno al nuevo caso detectado.
Bermejo, otro foco de contagio
Previamente, en enero de este año, ya se había confirmado otro caso positivo en el municipio de Bermejo, igualmente ubicado en una región considerada de riesgo para la propagación del hantavirus entre humanos.
“De enero a mayo, tenemos dos casos confirmados en las zonas endémicas de Padcaya y Bermejo, donde habita el roedor transmisor de esta peligrosa enfermedad”, detalló el Jefe de Epidemiología.
Recordó que, en el año 2017, Tarija enfrentó un brote significativo de fiebre hemorrágica por hantavirus, con 15 casos confirmados, de los cuales lamentablemente 8 personas fallecieron producto de las complicaciones derivadas de este mal.
Alta letalidad y complicaciones graves
Magne resaltó que el hantavirus es una patología de alta letalidad, pues provoca un síndrome cardiopulmonar que puede ser mortal si no se trata adecuadamente. La enfermedad afecta principalmente los pulmones, corazón y riñones del paciente.
“Esta enfermedad produce un encharcamiento de líquido en los pulmones. En aproximadamente 3 a 6 horas, el paciente no puede respirar por la acumulación de ese líquido, lo que puede complicarse con fallas en las funciones cardíaca y renal”, explicó.
Señaló que, justamente, el tratamiento y la convalecencia del hantavirus se centran en facilitar la presencia de diuresis para eliminar los líquidos acumulados en los pulmones. De lo contrario, la hidratación indiscriminada puede resultar fatal.
Respecto a la situación actual de los dos pacientes detectados este año, Magne informó que el primer caso, registrado en Bermejo, logró superar la enfermedad con un periodo de hospitalización y luego fue dado de alta con seguimiento domiciliario.
El más reciente paciente, de Padcaya, se encuentra en proceso de recuperación, aunque se desconocen mayores detalles sobre su situación clínica específica. No obstante, las autoridades mantienen un estricto control epidemiológico en ambos casos.
Recomendaciones para prevenir el hantavirus
Ante la presencia de casos positivos, el Jefe de Epidemiología hizo un llamado a extremar las precauciones, principalmente en las zonas rurales endémicas donde habita el roedor calomys, vector de la enfermedad.
“Las personas que viven en esas áreas conocen bien la patología, pero quienes se trasladan por turismo, caza, pesca o contrabando deben tomar precauciones al ingresar a viviendas cerradas por mucho tiempo”, advirtió Magne.
Recomendó abrir puertas y ventanas para ventilar los espacios y que ingresen los rayos solares, ya que el virus es muy débil y muere con facilidad ante la exposición solar. Además, indicó la importancia de limpiar pisos con agua y lavandina para evitar la formación de polvillo proveniente de heces u orina disecada del roedor, principal fuente de transmisión.
Fortalecen estrategias de contención
Las nuevas detecciones de hantavirus en Tarija han puesto en marcha los protocolos de contención epidemiológica por parte de las autoridades de salud. Magne aseguró que el personal del SEDES se encuentra capacitado para identificar casos sospechosos y tomar las medidas pertinentes.
No obstante, advirtió que existe un factor de riesgo adicional, ya que inicialmente el hantavirus puede confundirse con otros cuadros febriles, dificultando su diagnóstico oportuno, clave para un tratamiento efectivo.
“Cuando sospechamos de esta patología, se toman las medidas respectivas de inmediato. Hay que tener mucho cuidado con la hidratación del paciente para evitar complicaciones fatales”, enfatizó la autoridad epidemiológica.
En esa línea, señaló que están fortaleciendo las estrategias de educación a la población, sobre todo en las zonas endémicas, para que conozcan las señales de alarma, síntomas y acciones a tomar ante cualquier sospecha de hantavirus.
Vigilancia epidemiológica permanente
Si bien los dos casos confirmados de hantavirus en lo que va de año se encuentran bajo control, Magne reconoció que el riesgo nunca desaparece al tratarse de una enfermedad endémica en ciertas regiones de Tarija.
Por ello, las autoridades del SEDES mantienen una vigilancia epidemiológica permanente, con monitoreos continuos en las zonas de riesgo, sobre todo de cara a la temporada de mayor actividad e incidencia de esta enfermedad entre los meses de mayo y julio.
“Nunca bajamos la guardia. Esta es una patología que requiere de estrategias integrales de prevención, detección oportuna, control epidemiológico y atención médica adecuada para los casos positivos”, culminó el Jefe de Epidemiología.