FUENTE: CLARIN.
En una decisión que aparece como llamativa, Nicolás Maduro aseguró este lunes que la aplicación de mensajería instantánea Whatsapp es usada para «amenazar a militares y policías» de Venezuela y ante una multitud de jóvenes pidió que la eliminen. Más tarde mostró cómo la desinstalaba. Pero detrás de la decisión hay una búsqueda de cortar la comunicación de los seguidores de la oposición y la imposibilidad de acceder a los mensajes cifrados.
La aplicación de mensajería fue creada en 2009, se popularizó unos años después y recién entre fines de 2012 y principios de 2013 agregó la función de la creación de grupos. La misma fecha en la que Maduro llegó al poder en Venezuela.
El régimen tiene el control de los medios públicos en Venezuela. En radios y televisión pasan los mensajes de Maduro o de los integrantes del Partido Socialista Unido de Venezuela. No aparecen opositores, excepto en el canal Globovisión, en el que hubo algunas entrevistas a candidatos de la oposición, pero no a Edmundo González Urrutia, o la líder popular María Corina Machado.
En una Caracas empapelada con la cara de Maduro, hasta el domingo al caminar por la calles parecía que no tenía rivales para la elección presidencial. Obturadas esas vías de comunicación, el Comando con Venezuela de Machado y González Urrutia se volcaron a las redes y a Whatsapp.
El lunes siguiente a la elección en la que el Consejo Nacional Electoral le dio la victoria a Nicolás Maduro con el 51,95% de los votos frente al 43,18% de González Urrutia, Caracas amaneció de luto. Estaba nublado, había tránsito de feriado y el propio chavismo reconoció que el poco movimiento se debía a que había una celebración con reflexión en las casas.
Empezó un cacerolazo espontáneo en algunos barrios. Los videos se empezaron a viralizar por Whatsapp e Instagram y se replicaban los sonidos de cacerolas. Más tarde llegaron los videos a TikTok.
WhatsApp, un lugar donde el chavismo no llega
Los flyers de las convocatorias de María Corina Machado también corren por Whatsapp. Es un lugar a donde el chavismo no llega. Tras las protestas del lunes a la tarde, que explotaron cuando el CNE le dio el diploma a Maduro como presidente electo sin mostrar las actas y con la oposición también proclamándose la victoria, el régimen lanzó una represión. Las ONGs denuncian que hay 22 muertos. Pero además, empezó un férreo control en la calle, que hasta alcanza a los celulares.
Por eso empezaron a circular por Whatsapp «protocolos» para poder enviar mensajes con un cobertura mayor de la identidad y la ubicación. Ahí sugieren proteger la dirección IP en las llamadas y desactivar las vistas previas de los enlaces.
«Maduro no quiere Whatsapp porque su protocolo de cifrado y su popularidad han ayudado a los venezolanos a organizarse en contra de la dictadura. La declaración de ‘migrar voluntariamente’ no es más que una amenaza para imponer su voluntad. Bloquear Whatsapp puede ser costoso para los proveedores de Internet, tendrían que ajustar su infraestructura y tendría unos costos operativos muy altos. Aunque técnicamente es posible, el discurso de hoy apunta mas hacia la criminalización del uso de Whatsapp», explicó Luis Serrano, defensor de derechos humanos y derechos digitales en las redes.
«Whatsapp protege nuestras conversaciones con cifrado de extremo a extremo, por lo que no pueden espiar por allí, a menos que te quiten un dispositivo. Quieren criminalizar Whatsapp porque quieren someternos a la vigilancia gubernamental. En un entorno de crisis y censura, Whatsapp ha sido muy importante para acceder a información veraz. Bloquearlo favorece la desinformación y manipulación», insistió en un posteo en X.
Y concluyó: «Whatsapp nos permite organizarnos y defender nuestros derechos. Criminalizar su uso, también es un intento de desarticular movimientos sociales. Tienes derecho a la privacidad de tus comunicaciones en cualquiera de sus formas. No es un delito usar aplicaciones con cifrado. No es un delito usar WhatsApp».
Tras las protestas, Maduro acusó al magnate Elon Musk, dueño de X, de orquestar un golpe de Estado en Venezuela. Pero después criticó duramente a Instagram porque bloqueó mensajes de su esposa Cilia Flores y mencionó a Mark Zuckerberg.
En cuanto a la china TikTok, aseguró que es manejada por Estados Unidos y también la fustigó. Sin embargo, hasta el sábado previo a la elección subía videos bailando en búsqueda del voto joven.
Los argumentos de Nicolás Maduro para pedir que desinstalen Whatsapp
«Por Whatsapp están amenazando a la familia militar venezolana, a toda la oficialidad; por Whatsapp están amenazando a la familia policial; por Whatsapp están amenazando a los líderes de calle, de comunidad; por Whatsapp están amenazando a todo aquel que no se pronuncie a favor del fascismo», afirmó el mandatario en un acto con la juventud chavista.
«Yo voy a romper relaciones con Whatsapp, porque Whatsapp la están utilizando para amenazar a Venezuela, y entonces yo voy a eliminar mi Whatsapp de mi teléfono para siempre, poco a poco iré pasando mis contactos a Telegram, a WeChat (…) es necesario hacerlo, dile no a Whatsapp, fuera Whatsapp de Venezuela», sostuvo de manera casi insólita.
«Los principales instrumentos multiplicadores conscientes del odio y el fascismo, y el intento de dividir entre los venezolanos y de crear fanáticos fascistas que atacaran a la Policía, a los militares o al pueblo chavista en sus comunidades, son TikTok e Instagram», agregó Maduro.
Y dejó una amenaza, al remarcar que no hay «ningún tipo de regulación nacional» sobre el uso de las redes. Por eso encomendó al Consejo de Defensa y el de Seguridad que estudien el tema.